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04/04/2013
La Fiscalía alerta de que los niños cuelgan en internet hasta 50 fotos suyas a la semana
La policía detuvo en 2012 a más de 500 personas acusadas de delitos relacionados con el acoso sexual a menores a través de la red.
La fuerza con la que las nuevas tecnologías han irrumpido en la vida de los más pequeños ha hecho incrementar exponencialmente los peligros a los que, cada día, se ven expuestos. Los casos de pederastia, chantajes sexuales o amenazas se suceden en las redes sociales y en internet, un caldo de cultivo idóneo para cometer este tipo de delitos contra los menores por el anonimato que proporcionan.
«Existen los mismos peligros que en la calle, pero en internet se multiplican». Así lo resume la coordinadora de menores de la Fiscalía de Valencia, Gema García, quien avisa: «Cada fin de semana, un menor puede colgar entre 10 y 50 fotos» personales en distintas redes sociales. Estas imágenes, en la mayoría de los casos, pueden estar a disposición de un gran número de usuarios anónimos. «Recomendaría a los padres que, en primer lugar, conozcan en qué redes sociales están dados de alta sus hijos y que les digan que no difundan imágenes personales», añade la experta.
Un consejo muy a tener en cuenta al comprobar cómo se han disparado los delitos y las detenciones relacionadas con el 'sexting' (compartir fotos sexuales de menores vía internet o sms), el 'grooming' (hacer chantaje con este material comprometido para poder mantener relaciones sexuales) o el 'cyberbulling' (acoso a través de redes sociales, correo electrónico...). De hecho, a lo largo del pasado año, la Policía Nacional llevó a cabo más de 500 detenciones en toda España por estos delitos contra los menores, 262 de ellas realizadas por la Brigada de Investigación Tecnológica (BIT). En total, en 2012 el número de detenidos por injurias, amenazas y delitos contra la intimidad en internet, tanto a adultos como a menores, prácticamente se triplicó en relación al ejercicio anterior.
Libertad con cargos
En esta línea, una de las últimas detenciones ha sido la del joven de 27 años de Gandia, arrestado el pasado 25 de marzo por, supuestamente, acosar a unas 300 niñas menores de 14 años de distintos centros educativos de la localidad. Este hombre ha quedado en libertad con cargos, ya que, en el momento de pasar a disposición judicial, el juez no tenía los archivos intervenidos por la Policía Nacional en los ordenadores del acusado, según indicó ayer el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
Ayer se conocía también que la Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a un vecino de Nules a un año de prisión por otro delito de posesión de pornografía infantil, al contar en su ordenador con imágenes y vídeos de menores desnudas practicando sexo con adultos.
Para tratar de atajar este tipo de delitos tecnológicos, además de reducir a la mínima expresión la difusión de imágenes de los menores, la coordinadora propone también incrementar el control que los padres ejercen sobre sus hijos en relación al uso de dispositivos con acceso a internet, como los smartphones. «Hay que tener cuidado con la web cam, porque nunca sabes quién hay al otro lado, no dar ningún dato personal, que los padres usen sistemas de control parental, o que se fijen horarios para el uso del móvil o de internet», apunta Gema García.
Recuerda también que, con las tarifas planas, es más complicado saber exactamente el uso que los niños hacen de sus teléfonos móviles, y que es muy difícil detectar si se han colgado imágenes, por lo que reclama una mayor formación tanto por parte de los padres como de los hijos.
Se ganan la confianza
Por otra parte, fuentes policiales explicaron que, principalmente en los casos de 'sexting' y 'grooming', en primer lugar los delincuentes sexuales se ganan la confianza de sus víctimas para, posteriormente, obtener las imágenes comprometedoras y proceder al chantaje sexual.
Los expertos de la unidad central de investigación tecnológica, por su parte, también valoran la importancia de la prevención para evitar el ciberacoso, como ignorar o bloquear a los internautas que ataquen a través del correo electrónico o las redes sociales, así como denunciar inmediatamente en la comisaría o el juzgado los hechos, aportando todos los detalles posibles. Tanto los agentes como la Fiscalía coinciden en resaltar la importancia de establecer límites a los menores y de inculcarles el respeto a los demás en cualquier comunicación que compartan a través de la red.