7 de cada 10 empleados suelen violar las políticas de seguridad de su empresa
En un reciente informe elaborado por la firma Cisco, se entrevistó a 2800 personas sobre sus usos y costumbres a la hora de la seguridad digital. Y pocos cumplen con las reglas de seguridad.
En un reciente informe elaborado por la firma Cisco, se entrevistó a 2800 personas sobre sus usos y costumbres en seguridad digital. Y pocos cumplen con las reglas de seguridad. Este trabajo de investigación se enmarca dentro del "Cisco Connected World Technology Report", un estudio internacional que examina las demandas y el comportamiento de las nuevas generaciones de trabajadores hacia el acceso a las redes, la libertad de dispositivo móvil, los medios sociales y los estilos de vida laborales.
Los resultados son claves al explicar cómo esta nueva mano de obra eleva los riesgos personales y corporativos en medio de un panorama complejo. De entre los muchos datos relevados, se destacan los siguientes:
- De aquellos empelados jóvenes que si son conscientes de las políticas de seguridad respecto a la tecnología, el 70% (globalmente) admitió haber roto las políticas de seguridad impuestas con variada regularidad.
Entre las razones para hacerlo, la más común fue la creencia de que los empleados no estaban haciendo nada incorrecto (33%). Y un 22% citó la necesidad de acceder a programas y aplicaciones no autorizadas para hacer su trabajo, mientras que el 19% admitió que las políticas no se aplican.
Algunos dijeron que ellos no tienen tiempo de pensar en las políticas cuando están trabajando, y otros dijeron que adherirse a las políticas no es conveniente (16%), que se olvidan hacerlo (15%), o que sus jefes no los están observando (14%).
- Uno de cada tres estudiantes universitarios afirmó que "no le importa compartir información personal online" y considera que "los límites de la privacidad se están liberando". De hecho, ya no piensa demasiado acerca de la privacidad.
- A la siguiente frase: "Las compañías restringen muchos dispositivos y aplicaciones de medios sociales", los jóvenes empleados dijeron que los juegos online (37%) eran la aplicación con mayor restricción. Los iPods (15%) eran los dispositivos más restringidos.
- Antiguamente, los vecinos se pedían huevo o azúcar. Ahora piden acceso a Internet. Y por eso se explica casi uno de cuatro estudiantes universitarios (23%) ha pedido a un vecino acceso a una computadora o a Internet, y casi uno de cinco (19%) admitió acceder a la conexión inalámbrica de su vecino sin permiso.
- Finalmente, las computadoras -especialmente las portátiles- quedan, cada vez más, sin supervisión fija. Más de la mitad de los empleados encuestados a nivel mundial (56%) dijeron que habían permitido a otros utilizar sus computadoras sin supervisión (familia, amigos, compañeros de trabajo y hasta personas que no conocían). Y el 16% admitió dejar efectos personales y dispositivos sin supervisar en público, mientras buscan algo para comer, beber en un café o para ir al baño.